La
designación de los nombres de las calles de los pueblos suele ser un trabajo
desordenado, muchas veces antojadizo y también condicionado por los intereses
políticos del momento. Pero en el caso de Ituzaingó, como Villa Udaondo, la
experiencia ha sido elaborada y realizada con inteligencia.
En 1940 el
intendente Rafael Amato por ordenanza municipal conformó una comisión de
vecinos para ordenar y dar nuevas designaciones a las calles de Morón.
En
Ituzaingó la responsabilidad recayó en uno de sus vecinos más notables, don
Raúl Goyaud, quien priorizó rescatar del olvido a numerosos protagonistas,
civiles y militares de la guerra con el Brasil. Atendía a ello que el nombre de
la estación y por extensión del pueblo, era un célebre hecho de armas que volcó
con el triunfo militar del Ejército Republicano, el enfrentamiento bélico en
favor del lado argentino: Ituzaingó.
Es por ello que la mayoría de las calles del
pueblo de esa época (hoy consideradas céntricas) presentan como característica
en común, una temática histórica que las vincula.
Podemos señalar también otras unidades
temáticas en la nomenclatura de las calles del Municipio de Ituzaingó: artistas
plásticos argentinos, especies arbóreas, tradiciones, naciones, militares
contemporáneos, maestras locales, entre otros.
Todo ello no ha sido casual, sino resultado del
trabajo del Sr. César Albistur Villegas quien con la colaboración de E. Pérez
Quintana elaboró y promulgó durante su gestión como intendente de Morón
(1948-55) el nombre de la mayoría de las calles y plazas de nuestra localidad.
Por eso, a todos ellos el reconocimiento que merecen.
Los estudios sobre nomenclatura de calles no
son habituales y más allá de la curiosidad que puede despertar saber quién fue
tal o cual personaje, motiva este esfuerzo contribuir a una aproximación para
la comprensión de nuestra historia. Por ello se acompaña este trabajo con un
contexto histórico, mapas, documentos e ilustraciones que complementan las
biografías presentadas.
La cantidad de nombres impiden abordar este
estudio en una sola presentación por eso lo consideramos como primera parte,
procurando en un futuro no lejano concluir este ambicioso y necesario proyecto
en el convencimiento de que el conocimiento y comprensión de nuestro pasado,
rescatando historias, personajes y hechos cotidianos, fortalecerá nuestra
identidad local, valorando nuestras raíces comunes y por qué no, queriendo un
poco más a la comunidad a la que pertenecemos.
Deseo expresar mi agradecimiento por la
colaboración recibida al Sr. Rolando W. Goyaud y al periodista e historiador
moronense Alberto Lacoste.